Todos los Santos
El Calendario litúrgico es el conjunto de celebraciones durante el año dedicadas a los misterios de Cristo y a la memoria de los santos. Dentro de éstas destaca la solemnidad de Todos los Santos, la festividad en que la Iglesia recuerda a la totalidad de los santos, incluyendo a los desconocidos y a los que no poseen celebración propia.
La importancia de la veneración a los santos o culto de dulía, proviene del ejemplo que proporcionaban como modelos de vida acorde a las virtudes cristianas. Así, todo aquel que diera testimonio de su fe a través de sus actos, era considerado santo por la tradición. Fue hasta el siglo X que el Papa Juan XV emitió la primera canonización oficial, elevando a los altares a Ulrico, obispo de Augsburgo. El proceso se institucionalizó con la creación de la Congregación de Ritos por Sixto V en 1588, organismo encargado hasta la actualidad de revisar las causas de canonización.
Los primeros santos que recibieron veneración en el cristianismo fueron los mártires. En un principio sus fiestas conmemorativas eran de carácter local en donde habían sido martirizados o se conservaban sus reliquias. A partir del aumento del número de mártires en el siglo IV, la veneración a los confesores de la fe y la imposibilidad de festejarlos en fechas particulares, el 13 de mayo del año 610, el Papa Bonifacio IV implantó para el cristianismo occidental una celebración en común. La fiesta fue establecida durante la consagración del Panteón de Agripa a Santa María de los Mártires, el primer templo pagano en Roma reutilizado para el culto cristiano.
La actual fecha para la celebración de Todos los Santos, fue modificada del 13 de mayo al 1ro de noviembre por el Papa Gregorio IV, con motivo de la traslación en el año 835 de un gran número de cuerpos de mártires que fueron colocados en la iglesia de Santa María de los Mártires. Hasta el presente, el 1ro de noviembre es la fecha solemne dedicada a recordar a todos los santos del cielo, observada también por los cristianos ortodoxos, durante el primer domingo después del Pentecostés.
En Nueva España, desde la llegada de las órdenes mendicantes, se implantaron las festividades de Todos Santos y Fieles Difuntos, celebradas el 1ro y 2 de noviembre respectivamente. De este modo, el 1ro de noviembre se realizaba un oficio de Solemnidad denominado In Festo Omnium Sanctorum y se exponían a veneración las reliquias, los restos delos cuerpos de los santos, con el objetivo de que los devotos tuvieran ocasión de ofrecerles ruegos y acceder a sus beneficios espirituales, en memoria de a quienes pertenecieron.
Los santos, modelos ejemplares de vida tanto para los miembros de las órdenes religiosas comopara los cristianos seglares, estaban presentes en la sociedad a través de obras literarias, pinturas y esculturas que servían como recordatorio de su existencia terrenal. El Museo de Arte Religioso Ex Convento de Santa Mónica, posee un rico acervo que nos comunica la devoción piadosa de los habitantes de Nueva España hacia los santos, especialmente en la Puebla de los Ángeles.
Curadora
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Montserrat Báez Hernández
Composición de la exhibición
Galería de la exhibición
RESUMEN
No. de piezas expuestas
Pinturas
Libros impresos
Objetos
8
4
4
0