La Presentación de Jesús en el templo
La tradición de celebrar la Presentación del Niño Jesús en el Templo se remonta a una de las prácticas judías para el cumplimiento de la ley de Moisés (ca. 1272 a.C.), principios morales retomados posteriormente en el Antiguo Testamento. Dos de estos mandatos obligaban a los habitantes a llevar al templo -después de cuarenta días del parto- a los primogénitos, así como a la madre para ser purificada. La desobediencia a estas disposiciones implicaba la muerte.
Esta fiesta coincide con la fecha de la Candelaria, celebración de origen romano dedicada a Lucina, diosa que asiste a las mujeres durante el parto, nombre también dado a las diosas de la Luz (Diana) y del alumbramiento (Juno). La tradición cristiana tomó de esta fiesta pagana el símbolo de las candelas y las aplicó en honor de la Purificación de la Virgen.
En Mesoamérica la fiesta de los tlaloques integrada en el calendario agrícola realizada en honor al dios de la lluvia, coincidía también con la Candelaria, razón probablemente por la cual se mantiene la costumbre de llevar a bendecir semillas junto con la presentación y bendición del Niño Dios, así como de adornar con romero, manzanilla y "piedra de rayo" basalto fulminado que se considera mágico.
De España llegó la costumbre de tener en casa una imagen del Niño Dios usualmente desnudo, porque así se cree que estuvo en la gruta de Belén, además porque de esa manera se le puede dar vestimenta, postizos, atributos y otros elementos temporales que humanizan la imagen.
En la Nueva España surgió la tradición de levantar al Niño Dios del nacimiento, por la madrina que le arrulló en la Nochebuena y quien debe vestirlo con ropaje nuevo de acuerdo con la advocación que le toca para el año -definida según el número de veces que ha sido vestido- y llevarlo al templo el 2 de febrero para ser bendecido. Por la tarde el Niño Jesús es devuelto a sus dueños, quienes deben ofrecer una merienda con tamales y atole. El Niño vestido, lucirá en el altar familiar o en algún lugar distinguido del hogar.
Otra tradición en Puebla es la confección de espléndidas alfombras realizadas a base de semillas de maíz, lentejas, frijoles, calabaza y otras.
Curador
Composición de la exhibición
-
Eduardo Merlo Juárez
Galería de la exhibición
RESUMEN
No. de piezas expuestas
Pinturas
Libros impresos
Objetos
8
4
4
0